El proyecto busca una mejora integral del servicio para toda la zona.

En los últimos meses, la distribuidora EdERSA desarrolló un paquete de obras en la localidad de Cinco Saltos, Campo Grande, Cordero y toda su zona de influencia, en procura de mejorar la calidad del servicio eléctrico, ofrecer estándares de seguridad pública superadores, y optimizar el suministro durante la época estival que se avecina.
“Fue un año realmente atípico, pero las obras nunca se detuvieron. En la zona urbana de Cinco Saltos renovamos y modernizamos más de 4.000 metros de líneas en baja tensión, lo que generará amplios beneficios para los vecinos dado que el servicio gana en previsibilidad y calidad”, explicó el responsable técnico de la sucursal local de EdERSA, Emanuel Bahnmuller. Esos trabajos se complementaron con la realización de cientos de kilómetros de poda preventiva, en zonas urbanas y rurales, que ofrecen mejoras sustanciales tanto en los suministros durante épocas de inclemencias climáticas como en seguridad pública.
Dentro del plan hubo un objetivo central: brindarle mayor confiabilidad eléctrica a todo el corredor de la zona, desde la ruta 151 hasta el Lago Pellegrini.
“Por eso es que montamos reguladores de tensión en la línea de media tensión que abastece los suministros del Lago Pellegrini y El Arroyon. Esos sectores tienen varias particularidades: por un lado, no cuentan con suministro de gas, por lo que los vecinos se calefaccionan con electricidad y, además, la demanda aumenta considerablemente también en época de altas temperaturas. Todo eso ocasiona incrementos intempestivos en la demanda y variabilidad de la tensión, dos factores que ahora será regulados por estos artefactos que colocamos. Por ello es que el servicio será más previsible y confiable, mejorando notoriamente los índices de calidad del producto técnico”, indicó Bahnmuller.

Pensando en la zona rural y productiva, también se dispuso el montaje de un reconectador sobre la línea de media tensión que recorre la ruta Provincial 151. Este artefacto, de última generación, evita cortes de energía y reduce los tiempos de reposición del servicio, algo fundamental sobre todo durante temporales de lluvia o vientos.
“El reconectador está telecomandado de manera electrónica y lo que permite es aislar la falla, para de esta manera reducir a la mínima expresión el área de la contingencia. Así, encontramos con mayor rapidez el problema y, por sobre todas las cosas, no saca de servicio el alimentador completo, sólo donde existió la falla”.

Esta obra ya beneficia la zona norte rural de Cinco Saltos, la margen noroeste del río Neuquén, todas las chacras del área y la bomba de agua. “En unas semanas colocaremos otro reconectador, que cumplirá la misma función pero hacia el sur, por la ruta 151 rumbo a Cipolletti”, culminó el ingeniero.