Es el octavo destruido en pocos meses.

Una zona rural de Allen amaneció hoy nuevamente con la luz cortada, producto del accionar de delincuentes que volvieron a robar y destrozar instalaciones eléctricas en esa localidad.

Se trata ni más ni menos que del octavo transformador de media tensión vandalizado o robado en esa zona durante los últimos meses.

El artefacto de 63 KVA de potencia fue volteado por los malvivientes desde la plataforma donde estaba instalado, a la altura de la Chacra 35, y destrozado para poder sacarle todo el cobre que había en su interior. En el lugar quedaron los restos del transformador destruido y una escalera de tipo cosechadora, que utilizaron para concretar la faena.

El reclamo llegó a oídos de los operarios de EdERSA pasadas las 9.00 de hoy, a partir de un llamado realizado desde la empresa YPF, que cuenta con instalaciones cercanas al lugar donde ocurrió el ilícito.

Sólo desde noviembre a la fecha, en Allen se robaron o destruyeron 8 transformadores de media tensión, con un costo para la distribuidora que supera los 4.000.000 de pesos, y con una enorme y masiva afectación en el servicio de distribución eléctrica.

La preocupación por los robos es enorme porque se producen periódicamente, en sectores rurales y también urbanos, y generan un enorme riesgo para la seguridad pública y de las personas.