«Sacar a los chicos de la calle…». Leonor Salazar lo dijo con un hilo de voz, emocionada, y la frase quedó suspendida en el aire helado, en la barriada de J.J.Gómez. La mujer recibió a Tete Coustarot, la madrina de EdERSA, en el merendero comunitario «Corazones», un lugar que ofrece comida, contención y amor a decenas de chicos.
La distribuidora eléctrica desarrolla su programa de Responsabilidad Social Empresaria que apunta a colaborar, en toda la provincia, con instituciones civiles sin fines de lucro.
Esta vez fue el turno de Leonor y los suyos, quienes recibieron electrodomésticos y víveres para mejorar los días en ese lugar tan importante para muchos vecinos del lugar.
«Qué premio vas a tener vos en la vida!», la elogió Tete. Nada más cierto que eso.