Los períodicos hechos delictivos generan una honda preocupación.
Los delincuentes no dan tregua y en un puñado de horas robaron un transformador y cientos de metros de cable de media tensión en Allen, Cervantes y General Enrique Godoy, generando un enorme riesgo en materia de seguridad pública y dolores de cabeza a miles de familias, que se quedaron sin luz.
Los recurrentes hechos delictivos de este tipo preocupan cada vez más, por el peligro que conllevan y la cantidad de usuarios a los que perjudican.
El lunes por la madrugada, las cuadrillas de operarios de General Roca debieron trabajar a contrarreloj para recuperar el servicio en zona de Colonia Fátima (Cervantes), donde delincuentes se alzaron con 400 metros de cable de media tensión, y provocaron la salida de servicio de toda una fase desde las 3:40 a las 9:15.
En Allen, también el lunes por la mañana, robaron y vandalizaron el octavo transformador de media tensión en apenas 4 meses, acarreando una enorme pérdida económica para la distribuidora EdERSA.
Y hoy, ya en General Enrique Godoy, se registraron dos robos de cable en líneas troncales (500 metros), ocurridos en la ruta Nacional 22 y muy cerca de la subcomisaría de la localidad.
