En Cervantes, los robos eléctricos son más que moneda corriente. Con total impunidad, anoche los delincuentes dejaron sin energía a toda la localidad, tanto el casco urbano como el sector rural. Y no fue un solo robo de cable, si no que esta vez fueron dos, separados por un puñado de minutos.
Preocupa la impunidad que existe particularmente en Cervantes en relación con las vandalizaciones y robos contra instalaciones eléctricas. Y hay un dato que es elocuente: en lo que va del año, de todos los hechos delictivos de este tipo que ocurrieron en Río Negro en media tensión, casi el 40 por ciento se registraron en esta localidad cercana a General Roca.
Entre la medianoche de ayer y las primeras horas de hoy fueron dos los robos, totalizando más de 500 metros de sustracción de cable de media tensión, con un enorme riesgo para la seguridad pública y un gran perjuicio para miles de vecinos.
En horas de la medianoche, la guardia operativa de EdERSA recibió un llamado alertando sobre un corte de servicio en un sector de Colonia Fátima. Cuando llegaron los operativos, se encontraron con el escenario de costumbre: oscuridad total en la zona, cables en el aire cortados. Despejaron el peligro, aislaron la zona y restablecieron el servicio de esa parte de la ciudad desde otro alimentador, cuando el reloj marcaba la 1:35.
Claro, menos de media hora después, los delincuentes volvieron y siguieron con la faena, pero esta vez dejaron a oscuras toda la ciudad. “Tuvimos que volver, hacer los trabajos nuevamente y recuperamos el servicio alrededor de las 2.30”, explicó una fuente operativa de EdERSA.
Los robos ocurrieron sobre la ruta Nacional 22, en un sector que está a mitad de camino entre Cervantes y Roca. Mismo sitio donde los delincuentes hicieron de las suyas hace 5 días, el jueves 21, también dejando sin luz a toda la localidad.